19.7.08

EL PODER DE LA CONFIANZA

Charla de Ralpg Barile con el Dr.Daniel Scian

¿En qué cosas tiene confianza?

Tengo una confianza básica en la realidad, en la vida, en el universo, y el punto donde la confianza se hace difícil es en las relaciones.

¿Por qué?

Porque nosotros somos los únicos seres capaces de burlar la confianza, olvidándonos de lo que es uno. Creo que un chico cuando nace tiene un conocimiento, no intelectual obviamente, pero ese conocimiento es confianza y no logra sobrevivir a la sociabilización.

¿Por qué?

Es un fenómeno de la vida del ser humano, el hombre tiene que cumplir ese fracaso. Es necesario, todos los mitos de la creación hablan de una creación fallada, la Biblia dice que hasta el mismo Dios se equivocó, lo que está diciendo no es que se equivocó, sino que la cosa funciona asi.

¿Uno tiene que aprender sobreponiéndose, teniendo confianza en algo?

No es tan simple, hay que desilusionarse para poder reconstruir, volver a construir sobre una base nueva, pero con una experiencia. Si no es así hay un error que va trasladándose, que es lo que se suele hacer habitualmente.

¿Cómo sería educar desde la confianza?

En principio generando confianza, volviéndonos confiables, pero tenemos la desgracia que nos educó gente que no fue confiable, no porque fueran malas personas.

¿Desde chico sabía que el que le enseñaba no era confiable?

Aprendí a dudar. En los primeros dias de clase del colegio la maestra me preguntaba cosas, y yo llegaba a casa y le decía a mi mamá: “Por qué me pregunta a mi si ella es la que sabe”. Y si sabe que no sé, y me pregunta cosas, la malvada es ella. Toda la educación funciona como una serie de cacería; por ejemplo, cuando pasan lista para tomarle un exámen: a, b, c, ese famoso escalofrío del abecedario cunado venía tu letra.

¿Por qué hay que tener confianza en función de un objetivo y no confianza por si misma?

Cuando se conquista un estado de confianza no se necesita tener un objetivo. Y eso se logra experimentandose confiable, o experimentando el resultado de la confianza.

¿Cómo es eso?

El famoso conócete a ti mismo. En general, uno no es muy confiable en uno mismo, porque tiene sus límites, sus miedos, sus angustias, entonces ahí es donde uno se vuelve poco confiable, pero a pesar de eso insiste en quererse, en respetarse, y en tenerse paciencia.

¿Qué es experimentarse?

Experimentar las contradicciones que uno tiene constantemente, esto de tener muchos yo, esto de ser una multitud, es muy viejo pero es actual, todo el tiempo lo podés experimentar. Un ejemplo: yo fumaba cigarrillos, fumaba muchos, y a la noche, cuando apagaba el último, me sentía un héroe y decía ahora voy a dejar de fumar, y a la mañana siguiente, después de tomar un café, un puchito; y ése era otro que se levantaba y se había olvidado completamente del que había decidido dejar de fumar. En algún momento se cruzaron los dos y confrontaron la fuerza que tenía cada uno dentro de mi, y los dos tiraban con la misma fuerza para lados contrarios. Es un ejemplo totalmente banal, pero es un ejemplo bastante limpio, eso pasa con las emociones, con los vínculos, con tus objetivos de vida, con cualquier cosa, y ahí comprobás que sos múltiple, que tenés un montón de gente adentro tuyo y que se están peleando todo el tiempo.

No hay uno que sea el jefe

No hay uno que mande, y en eso consiste el trabajo terapéutico, en generar uno que tome la manija, pero que sea el más confiable.

¿La conciencia son todos esos, o es uno?

No, la conciencia es una función, y ellos van ocupando ese lugar de la conciencia.

¿Van rotando?

Exactamente. Para que uno sea el que mande, y para ser confiable, tiene que ser uno que no esté enemistado con todos los otros, o sea que acepte a todos. En la lucha uno gasta mucha energía en que gane uno, el que a mi se me antoja que es el mejor.

¿Existe uno mejor?

No, pero el mejor es el que los puede aglutinar a todos.

¿Es como una interna por el liderazgo?

Es una pelea por el liderazgo que armonice y que haga que todo el equipo funcione, pero hasta que uno se aviva de eso, se la pasa perdiendo tiempo en que uno triunfe a expensas de los otros, que gane uno y que los otros pierdan o no existan, no tiene que existir esta parte de mí. El líder tiene que tener cosas que no tengan los otros; por ejemplo, una observación desapasionada de las cosas, desapegada. Para estar bien tenés que pagar un peaje, yo estoy bien porque estoy con tal persona, yo estoy bien porque nado bien, o porque tengo nariz linda, bueno, estás perdido, porque si te basás en condiciones podés perderlas. No sirve quererse a si mismo porque sos un excelente cantante.

¿Cuál es la estrategia que recomienda?

Mirar la base que está en la experiencia, y recordar, recordarse a sí mismo, es mas viejo que la injusticia, está en todas las tradiciones: observarse. Observarse con una paciencia infinita, porque la observación requiere muchos años para que dé resultado. Observar es observarse a sí mismo sin condenarse.

Cuesta perdonarse.

El que perdona es un yo distinto al que no perdona, y ése es el que tiene que tomar la manija porque no condena a nadie.

¿Hay técnicas para lograrlo?

La técnica es la división: divide y reunarás. El gran drama es cuando uno cae como un gran chorlito en la cosa masiva de una emoción, esa emoción se convierte como en un fuego. Las emociones que normalmente están en el pecho, son como un fuego que quema, cocina nuestros pensamientos, que son como acuosos y eso produce un vapor que es como nuestra ideología, la ideología llueve alimentando todo ese mecanismo. Si estoy angustiando por X motivo y me empiezo a dar manija mentalmente, eso terminado creando una ideología: a mi siempre me pasan estas cosas. Entonces busco un montón de bibliografía interna para hace un informe en el que quedás condenado.

¿Por qué?

Porque hay una necesidad de unidad, y ésas son unidades truchas. Si uno divide cualquier experiencia negativa, automáticamente la puede dominar. Me siento tremendamente angustiado, bueno, estoy angustiado en este momento, por alguna razón será. Hay que salirse de eso; no hay que quedarse buscando el quinto elemento de esa situación. Eso es un proyecto idiota, te condena a consolidarte en un estado de ánimo. Es un problema que tiene que ver con la cultura. El siglo XX se dedicó a perder todo el sentido de trascendencia, que es el sentido más verdadero, por la degradación de todas las instituciones, las religiones. Surgieron reacciones espontáneas de la gente para bajar de un hondazo todo lo que fuera trascendente.

¿Y eso no tiene que ver con el capitalismo?

Yo diría que si, es parte del sistema. El pragmatismo tiene una lógica que te dice que tenés que ser pragmático, no existe algo que no tenga un valor económico. Los setenta fueron los últimos tiempos de la cosa porque si, de lo inútil, de lo artístico, y creo que les dieron un golpe en la nuca y dejaron en coma cuatro a ese espíritu, y el pragmatismo que se impuso hace que todo eso sea visto como estúpido-romántico.

¿Es diferente América de Europa en ese sentido?

Los europeos están todavía peor, porque desde su omnipotencia destruyeron esta idea de lo trascendente y se quedaron totalmente vacíos.

Pero tienen euros.

El capitalismo es la base de la desconfianza. Entre personas normales se establecen vínculos de confianza cuando se hace algo en común, pero en una relación de competencia te exigen un montón de pruebas para ver si yo puedo confia en vos y vos podés confiar en mi, y es la forma constante de frustar al otro.

¿Qué es confiar?

Los dos momentos de mayor vulnerabilidad de un animal, atávicamente, eran bajar a tomar agua del río y aparearse. El animal tenía que tener un estado de confianza para bajar la defensa y la guardia. Esa es la escena original de la confianza. Confiar es no defenderse.

¿Qué bloquea uno cuando se defiende?

Anula todo tipo de receptividad, porque está impelido a anticipar un futuro, luchar o huir, y por lo tanto no puede recibir, no puede contener.

¿En qué confiar y cómo confiar?

Es una actitud. Un discípulo de Mahoma le decía: “¡Oh, Maestro, yo confío tanto en Dios que ni siquiero ato el camello!" Y Mahoma le contestó: “Vos rezá, sé hombre de fé, pero atá el camello”.

¿Cuál es el daño a la confianza que encabeza el ranking según su experiencia psiquiátrica?

Todos los daños que se hacen son por miedo. Esa persona me defraudó porque en realidad tenía miedo de que yo la defraudara. Creo que la clave para vivir con cierto grado de felicidad es no esperara nada del otro. El 97% de las defraudaciones tienen que ver con sus expectativas no cumplidas.

¿Hay que aprender a estar en el presente, cortando el diálogo interno?

Exacto, y para eso hay que sentir el cuerpo. Prstar atención a la respiración, respirar un poco más lento. Al estar atento, estás presente, y cerraste un montón de ventanas.

¿Hay diferencia de género en cuanto a la confianza?

Las mujeres son un poco mas sabias para engañar. Los hombres son frontales y bobos, más previsibles.

¿El miedo a la desconfianza produce una necesidad de control, e inevitablemente eso genera desconfianza?

El universo juega a no mostrase hasta que confies. Mientras le exijas pruebas, no se muestra. El trabajo es un largo e intenso proceso de confiar en uno mismo. Si yo confío en mi, voy a aprender a confiar en el otro.

¿En qué confía a nivel global?

La gran revolución de los próximos tiempos va a ser el hecho del protagonismo de la gente común. Es decir, que se va a dejar de esperar que se les bajen los principios y criteros de un lugar de poder, y generará sus propios criterios y principios. Y eso no va a ser un caos, va a ser el orden del deseo.

¿Confía en la magia?

Es una de las cosas que no está descripta por el pensamiento oficial, pero existe. Hay un bastardeo de eso, pero en su origen son formas de contacto con otras partes de la realidad que no son fácilmente perceptibles. Los chicos tienen fácil acceso a todo eso y la cultura se encarga de reprimir esa faceta.

Insisto, ¿se puede recuperar la confianza en una persona que ya le ha fallado?

Si, es posible, pero parece difícil. Es una lucha contra la imposición de la cultura, contra el aprendizaje propio, los propios miedos. Es un salto cuántico en la evolución individual.

¿Y eso qué es?

Es un salto que no sigue la secuencia lógica, un cambio de modo hacia algo nuevo.

Entrevista en la revista BUENOS AIRES METRÓPOLIS, Nº 8.
Gentileza Daniel Scian.

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