UNA MIRADA DE BIOMÚSICA

Por Marcelo Calcagno, psicólogo, especialista en bioenergética - Uruguay
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Cuando me llegó el correo sobre un taller de BIOMÚSICA me pareció muy interesante hacerlo. Me llamó el nombre. Poder ver de qué se trataba, cómo se vivenciaba, cómo se trabajaba, las herramientas proporcionadas, y cómo utilizarla. ¡Fueron descubrimientos y enseñanzas enormes! Me encantó escuchar conceptos teóricos parecidos a los de Bioenergética, pero con otros nombres. ¡La sensación de calidez y continencia generado en el grupo era hermoso! Sin duda, uno de los compromisos de la Biomúsica es con armar grupos en los cuales la amistad y el compañerismo se puedan palpar. Sentía el contraste de nuestros tiempos signados por el miedo y desconfianzas generalizadas creadas por años de individualismo, explotados comercialmente. Pienso es uno de los tantos elementos bonitos de Biomúsica, pero no explicitados: volver a sanar un tejido social muy maltrecho por años y años.

Es un poco difícil poder definir el concepto. Pues cuando uno define, limita por un lado y por otro, restringue posibles abordajes enriquecedores. Desde esta forma de pensar es un poco lastimoso limitar a la Biomúsica.
Sus ideas principales vienen de un argentino llamado Mario Corradini, músico, por lo cual su abordaje implicaba sonidos. De esta forma empezó a trabajar con la Musicoterapia. Investigó como el sonido repercute en la personalidad de los sujetos. También pudo ver como las aportaciones de otras técnicas como el Yoga, Bioenergética, TaiChi, etc. tenían un buen efecto en el bienestar de las personas, por lo cual trató de vincular ambos mundos. Desarrolló una técnica básica llamada por sus iniciales: LADE. Estas iniciales significan: L de limpiar, A de acumular, D de dirigir, y E de equilibrar.
Estas fases del proceso son un conjunto de actividades físicas que repercuten en el proceso bioenergético de las personas. A través de estas técnicas el sujeto va cargándose de energía. Luego es dirigida por medio del sonido a un determinado punto del cuerpo para trabajar el sistema energético de esa zona. Esta locación a trabajar y su energía tiene un correlato emocional importante. Por lo cual activar esta zona significa producir procesos emocionales, y sus homólogos racionales: los miedos. De esta forma se apunta a destrabar los procesos energéticos bloqueados en determinadas zonas del cuerpo. Y por consiguiente se libera(identidad funcional de por medio) los procesos racionales concomitantes.
Si esto es bueno en forma individual... ¿Cómo sería hacer este proceso entre varias personas? El sonido producido sería amplificado por cada integrante del grupo. De esta forma el proceso grupal haría de caja de resonancia del sonido utilizado. Haciendo el efecto de amplificador en el proceso individual. Pasando de un proceso individual, a un proceso grupal. En el cual cada una de las partes se alimeta del grupo, y este de cada uno. Hace efecto de retroalimentación. De esta forma se dice cuanta mayor cantidad de gente mejor.

Es interesante ver cómo los procesos individuales son alimentados por los procesos grupales.

La energía de un grupo se puede palpar en determinadas circunstancias, casi como un caramelo. Lo ves, lo sentís, lo percibis en el aire. Y ves como gente que era muy reservada en sus opiniones, acciones, pensamientos, cambian rápidamente. Se permiten hablar, decir, discutir, interactuar, actuar, representar, fantasear y hasta en alguna ocasión ensoñarse con los pies en la tierra. Cuando uno percibe esto lo único a decir, parafraseando una expresión de mi hija de 6 años:

"¡¡¡HHHUUUUUUUUUAAAAAAAUUUUUUUUHHH!!!"

Aquí vemos otro punto interesante de la Biomúsica: nos permite traspasar el concepto de grupo, y nos lleva a la idea de comunidad. Se amplifica el campo de resonancia del trabajo. Se puede escalar de la idea de grupo al de comunidad de trabajo.
La propia movilidad del grupo va cambiando. No es lo mismo hacer trabajos entre 5 personas que con 10. Los grupos al llegar a un determinado punto de "ebullición" van tomando un conjunto de caracterísitcas propias. Si compararamos un grupo con otro grupo veríamos diferencias entre ambos. Esto es otro elemento lindo de trabajar en grupos.
Entonces podemos ver trabajando en los grupos:

1. La capacidad de amplificar los procesos energéticos, tomados desde los propios individuos.
2. Cada grupo es diferente al otro. Pues como en una mezcla perfecta, cada integrante coloca elementos personales para la producción de un grupo con determinadas características. Por decirlo de alguna forma: se transforman y toman elementos propios. Los cuales los separa, y al mismo tiempo, los acerca a otros grupos similares en su finalidad.
3. Su capacidad terapéutica de producir, generar, cambiar, modificar y remover procesos energéticos estancados, aquilosados en el campo bioenergético individual.
4. Su trabajo frecuente va produciendo un efecto PREVENTIVO de enfermedades emocionales y físicas. Y si además lo utilizamos en niños preescolares... ¿Qué piensan que puede puede suceder?

Ante este panorama el coordinador debe tender a caminar con pasos muy suaves y sutiles para no obstruir los cambios energéticos en los integrantes. Para ello debemos observarnos a nosotros y como esa liberación nos toca en nuestro propia personalidad, o mejor dicho, en nuestro campo energético personal. Pues como todos, somos seres humanos con una historia personal y social propia. No tengamos miedo a perder el control, pues en toda equilibración del sistema grupal tiende a generarse un orden propio de ese conjunto de personas. Cada grupo, como decíamos antes, es diferente a otros.
A la Biomúsica se le llama Musicoterapia evolutiva pues piensa al sujeto en continua evolución. Incluso en las etapas de enfermedad podemos sacar conclusiones interesantes. La idea de ser humano es de personas en continuo proceso de evolución. Existiendo momentos en el cual el sujeto se detiene en su camino por determinadas circunstancias o problemas. A través de la Biomúsica también puede tratarse de prevenir el congelarse en la evolución personal.
A mi forma de ver este es uno de los puntos más queridos de la Biomúsica: su compromiso con la PREVENCIÓN. El trabajo con las técnicas de Biomúsica es eminentemente preventivo. No significa que no tenga elementos terapeúticos, pero no es la idea principal.
Siempre estuve de acuerdo con la idea principal de Reich en sus últimos años: Lo importante no es curar la neurósis, es prevenirla. Esa idea siempre me obsesionó. Traté de armar dispositivos terapéuticos basados en técnicas bioenergéticas, pero no me daba cuenta de un error enorme... la idea de Bioenergética nació de la clínica individual. Luego se trató de ampliar al trabajo con grupos. Ahora no es posible -por la propia técnica- trabajar con comunidades. Y aquí apareció la Biomúsica. Incluso hay registros de trabajo con 150 personas en México si mal no recuerdo. ¿Cuántas técnicas uno conoce con capacidad para trabajar con tan alto número de personas? Yo solo una. Puede haber más, pero las desconozco.

Apunta a un 1er. nivel de atención en salud. Se busca el prevenir, antes que curar. Lo cual lo hace único, a mi forma de ver. Y si trabajamos con los niños, los resultados a futuro son muy esperanzadores. ¿Qué futuro podemos pensar para nuestros hijos si en estos tiempos tan violentos y duros no le damos las herramientas para seguir adelante? Esa fué la idea inicial para armar un proyecto de trabajo con niños preescolares y Biomúsica, el cual estoy promocionando en jardineras. Idea no demasiado original pues el trabajo de Biomúsica con niños ya existe desde hace tiempo en otros países como Argentina, Italia, Chile, Cuba. Y sus resultados son muy buenos. A lo mejor alguién piensa: "¿Para qué desea aplicar una técnica de prevención, si el psicólogo está para curar a enfermos?" La pregunta se comprende, pero el concepto de psicólogo esta desdibujado. El psicólogo debe estar para ayudar a los sujetos con problemas en todos los niveles. Desde el 1º nivel de atención en salud (prevención) hasta el 3º nivel (terapéutica). Todo el sistema de saluda debe apuntar al 1º nivel, psicólogos incluidos: a la prevención. Evitar de todas formas que el sujeto llegue al tratamiento necesario. Pero para llegar a esta meta, debe haber un cambio sustancial en la forma de percibir la salud en la gente. En nuestra sociedad. Dejar de ir al médico cuando aparece el dolor, y buscar realizarse los chequeos necesarios para no llegar al tratamiento de la enfermedad. De esta forma estamos haciendo un cambio sustancial en cómo nos atendemos. Pasamos de ser solo consumidores de un servicio, a ser actores del mismo. Son cambios profundos en TODO un sistema de salud. En un país como Uruguay los cambios son lentos, pero se desarrollan, lo cual es una buena señal. Esperemos avanzar un poco más en estas concepciones.
Gracias a estas herramientas podemos auxiliar a los sujetos a seguir en su evolución.